EL GRITO DEL PUEBLO CRIOLLO POR LA
INDEPENDENCIA Y LA LIBERTAD.
El 20 de julio de 1810, quedó en la historia como el día que el pueblo colombiano se levantó contra la tiranía española. El grito de independencia por la desigualdad, el maltrato al pueblo, el racismo y las crisis económicas fueron algunos de los detonantes que iniciaron la chispa para que el estallido social se diera.
Los criollos, inspirados por la rebeldía de Manuela Beltrán (lideresa de los comuneros que en 1781 alzó su voz indignada contra los impuestos abusivos de los españoles), desataron un levantamiento político creando la asamblea popular. Los artesanos, indígenas, mestizos y campesinos comenzaron una independencia real y justa.
Esta fecha no fue el final del proceso emancipatorio, sino el comienzo de una lucha que hoy continúa. Durante doscientos quince años de historia se han dado hechos significativos de levantamientos populares, en la búsqueda por la definitiva independencia, combatiendo las clases dominantes y sus imperios que, aunque sean una minoría, siguen azotando la dignidad de los pueblos.
¿Cómo sigue Colombia hoy?
El pueblo sigue luchando y es prohibido olvidar nuestra historia. El estallido social de 2019 y todas las movilizaciones sociales desarrolladas desde entonces, como el actual paro arrocero, son la continuidad de todas las luchas y de todos los legados que nos han enseñado a resistir, abolir la esclavitud y defendernos de las clases dominantes que explotan y se lucran a costa de la población inerme y empobrecida.
El pueblo colombiano sigue defendiendo su independencia y combatiendo el capitalismo. Hoy 20 de julio de 2025 se conmemora un año más de este hecho histórico. Después de dos siglos, la memoria colectiva ha permitido gestar nuevas generaciones de inconformes, de colombianos rebeldes y resistentes, que luchan y han tomado conciencia para defender sus derechos, tener una vida digna, una nación justa y soberana.
Por lo tanto, es inevitable que el pueblo alce su voz y se haga sentir en medio de protestas, movilizaciones y levantamientos populares, destinados a derrocar un sistema de gobierno injusto y un modelo económico que enriquece a unos pocos, mata a millones de personas y acaba con el planeta.